En psicodrama se representan escenas y situaciones con ayuda de objetos, símbolos, etc. o en juegos de rol. A través de esta representación, la situación se vuelve presente y con ello vivible y revisable, ya que sólo podemos "experimentar" lo que ocurre aquí y ahora: sólo en el presente podemos percibir, "vivir" nuestra existencia.
Sin embargo, el pasado - al igual que el futuro - forman parte del presente, son inseparables. Nuestra historia está presente e influye en la actualidad, de tal manera que el trabajo aquí y ahora es a la vez tratamiento del pasado.
La representación de una situación va mucho más allá de la pura narración, incluye no sólo sentimientos, pensamientos, palabra, sinó también sensaciones (corporales), actos, etc.
Pero no sólo el "qué", el "cuándo" y el "quién" son significativos, también el "dónde" determina la experiencia, tiene gran importancia y no puede faltar en
el trabajo psicodramático.